Hombres y mujeres han percibido en más de una ocasión la inseguridad e insatisfacción, incluso estrés, provocado de pensar si hicieron feliz a su pareja o no.
Cerca del 21% de las mujeres que se casaron en la década de los 70 no habían tenido otra pareja sexual, mientras que sólo el 5% de las mujeres que se casaron a partir del 2010 reportaron ser vírgenes.