1. Utiliza alrededor del 30% del sueldo en gastos generales del hogar 
Alimentación, luz, agua, telefonía son algunas necesidades básicas del hogar. Intenta que éstas estén cubiertas antes de gastar el resto.

2. Destina hasta un 15% del sueldo en locomoción
La idea es que organices tus gastos de acuerdo al medio de transporte que utilices, independientemente si te trasladas en auto o transporte público, destina un monto para ello.

3. Ahorra el 10% de tus ingresos para eventuales emergencias
Ante cualquier imprevisto es mejor tener un poco de dinero ahorrado. Puedes abrir una cuenta de ahorro o invertir en fondos mutuos o incluso apartarlo dentro de tu propia casa.

4. Las deudas no pueden exceder el 20% de tu sueldo
El sitio Trabajando.com plantea que si estás en el límite o te excediste en los gastos, se recomienda juntar todo en una sola deuda y refinanciar la tasa de interés. También se recomienda que éstas se paguen a tiempo para evitar que el monto se eleve.

5. Prioriza y luego dispone de tu dinero
Una vez que tus necesidades y gastos básicos estén cubiertos, te debería quedar el 25% de tu sueldo. Ten en cuenta puedes disponer como quieras de este dinero, pero sin caer en más deudas.

Si bien los porcentajes podrían variar de acuerdo a las necesidades de cada persona, lo ideal es hacer el ejercicio de organizar el dinero mes a mes.