Sucedió en el inicio del segundo tiempo y el encuentro estuvo demorado durante unos instantes. El aficionado también reclamó por la invasión de Rusia a Ucrania y los derechos de las mujeres en Irán.
Brasil, quizás, no brilla, pero, más allá de las individualidades, que las tiene y muchas, ya funciona como un equipo. Tiene una línea defensiva muy difícil de batir y un ataque que, cuando está inspirado, es imparable.
Los europeos y los africanos protagonizaron un partidazo, con dos golazos, y empataron 3-3. Ahora deberán jugarse su última chance en el cierre del Grupo G.