El día de su muerte, provocada por el hundimiento de dos embarcaciones, otros cuatro menores fallecieron. Entre ellos su hermano Galip, un crío de cinco años, y la madre de ambos, Rehan, de 35. Ninguno tenía chaleco salvavidas. Doce personas perdieron la vida cuando intentaron cruzar el mar desde la localidad turca de Bodrum rumbo a la isla griega de Kos. Según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), un total de 2.643 seres humanos han corrido la misma suerte al tratar de atravesar el Mediterráneo a lo largo de este año.