El problema surgió debido a que no había las 48 hrs. de descanso, establecidos por la FIFA, entre el partido que el Tigre jugará ante Libertad de Paraguay el jueves y el que, en primera instancia, debía jugar ante Oriente el sábado.
El Tigre dista mucho al que hizo ilusionar a toda su hinchada la temporada pasada. Cayó sin atenuantes y no solo empieza a despedirse de la Conmebol Libertadores, sino que también empieza a ver lejana la posibilidad de clasificar a la Copa Sudamericana