El alcalde de Tarija, Johnny Torres, resaltó que, gracias al esfuerzo de los bomberos, las consecuencias fueron mucho menores a las del recordado incendio del 2017. Mencionó que en cuatro días se logró controlar el fuego con menos de 5.000 hectáreas afectadas y no sucedió como hace ocho años, cuando ardió durante 10 días y arrasó con cerca de 13.000 hectáreas.