Fueron imputados por la presunta comisión de los delitos de Enriquecimiento Ilícito de Particulares con Afectación al Estado, Legitimación de Ganancias Ilícitas, Delitos Contra la Salud y Organización Criminal.
Fueron enviadas a la cárcel de Obrajes. Son acusadas por, supuestamente, haber recibido sumas de dinero por parte de una empresa colombiana para favorecerla con la adjudicación de contratos.
La Agencia Estatal de Medicamentos y Tecnologías en Salud identificó 100 ítems de fármacos de dudosa calidad y procedencia que eran traficados por la banda de Desaguadero.