Pese a que él fue el gran impulsor de una reforma constitucional que permitirá la reelección indefinida y que se votará mañana en la Asamblea General, sorpresivamente Correa pidió a su bloque mayoritario (con 100 de los 137 escaños) que la reforma empiece a regir después de 2017, cuando se celebran las próximas elecciones.