El vicepresidente del Estado, David Choquehuanca, en sus primeras palabras tras ser posesionado en el cargo, emitió un mensaje de paz y búsqueda de reconciliación para todos los bolivianos.

"El poder tiene que ser para ayudar, el poder tiene que circular, el poder así como la economía se tiene que redistribuir, tiene que fluir así como la sangre fluye dentro de nuestro organismo, ya no más impunidad, justicia", dijo en un emotivo discurso.

Arraigado en sus creencias y orígenes ancestrales, Choquehuanca habló de superar la división, el racismo y la discriminación en el país, además prometió que será el fin de la “persecución política” y abogó por la independencia de la justicia.

“Los hijos hemos heredado una cultura donde nada está dividido, donde ayudar es motivo de crecer, el unirnos es el camino de siempre, el ayni, la Minka, y otros son la esencia de nuestro ayllu”, afirmó.

En esa línea, Choquehuanca aseveró que los bolivianos “debemos superar la división, el racismo y la discriminación entre compatriotas".

"Ya no más persecución política, ya no más judicialización de la política, ya no más abuso del poder, ya no más de impunidad. La Justicia debe ser independiente", aseveró.

Finalmente, resaltó que el nuevo Gobierno no se guirá con la premisa de la venganza ni el enfrentamiento. "Buscamos hermanad, no buscamos enfrentamientos, no somos de la cultura de guerra ni dominación”, acotó.

"El nuevo tiempo significa escuchar el mensaje de los pueblos, sanar heridas, mirarnos con respeto, recuperar la patria, soñar juntos, construir hermandad, armonía, integración, esperanza para garantizar la paz y la felicidad de las nuevas generaciones", afirmó.