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El Vicario de Cristo ofreció la ceremonia religiosa luego de participar de una reunión de 48 minutos con el presidente Evo Morales en Palacio de Gobierno.

Tras un minuto de silencio pronunció el discurso más esperado, aquel que reconoce el trabajo de Luis Espinal. “Que Dios lo guarde en su gloria. Él era un hombre que predicaba el verdadero evangelio, pido que hoy esté a lado de Jesucristo”, fue la bendición que dejó sentir el Santo Padre en el Plan Autopista, donde se concentraron unas dos mil personas para sentir la presencia de Francisco y evocar al martir.

 Antes de ingresar a la plaza Murillo, el Sumo Pontífice pidió que el Papamóvil se detenga con el fin de impartir la bendición a una imagen de la Virgen de Copacabana y a un niño, mientras las cientos de personas que se ubicaron en el sector se emocionaron hasta las lágrimas. Con este gesto, el Sumo Pontífice ha reafirmado la opción que manifestó desde la ciudad de El Alto hacia los niños

Muchas organizaciones sociales aprovecharán la visita del Papa para solicitar la beatificación del padre Espinal. El rector de la UMSA y expresidente de Derechos Humanos, Waldo Albarracín, dijo que esta es una oportunidad para que se conozca la figura del padre Espinal.

Entre los personajes que esperaban al Santo Padre, en el aeropuerto internacional de El Alto, había un numeroso grupo de niños, vestidos con atuendos que representaban a todos los departamentos del país.

Bolivia “es una tierra bendecida, con su diversa realidad cultural y étnica que constituye un llamado permanente al respeto mutuo, al diálogo”, dijo el Papa Francisco ante miles de personas que  llegaron hasta el Campus Papal, ubicado en el aeropuerto, para ofrecerle la bienvenida

El Santo Padre, que pisó suelo boliviano a las 17:29 horas de este miércoles 8 de julio, tras unas dos horas de viaje desde la capital ecuatoriana, fue recibido por el presidente Evo Morales y una delegación de autoridades del clero boliviano, autoridades civiles y militares, y una gran multitud de feligreses.

Con ese mensaje, felicitó al Sumo Pontífice por impulsar las postulaciones fundamentales de la lucha a favor de los pobres.

Antes de llegar al aeropuerto a la ciudad de El Alto, Francisco pidió sobrevolar  el Santuario de la Virgen de Copacabana. Asimismo, probó el agua mineral del manantial boliviano del Silala que se le entregó en el avión Boeing 737-700 de Boliviana de Aviación (BoA).