El futbolista Francis Koné recibió ayer el premio Fair Play por auxiliar a un rival que quedó inconsciente durante un partido de la Liga checa, en febrero de 2017.

Koné tiene 26 años y juega en el equipo Zbronjovka Brno, salvó la vida del portero rival Martín Berkovec, jugador del club Bohemians 1905, al evitar que se tragara la lengua tras un choque.

El incidente ocurrió cuando Berkovec abandonó su línea de meta para despejar un balón en profundidad. Sin embargo, chocó con su defensa Daniel Krch, y cayó al suelo inconsciente.

"No puedo quedarme quieto viendo cómo alguien se asfixia. Es imposible", cuentó Koné en declaraciones al portal de la FIFA.

Koné nació en Costa de Marfil y se nacionalizó para jugar para Togo, un pequeño país en África Occidental, por parte de su madre. Uno de los dramas del futbolista es lidiar con el racismo. 

En total, el jugador salvó a cuatro jugadores en los últimos ocho años en diferentes circunstancias.