09 de octubre (Cambio 21).- Un bebé de nueve meses de edad y de padres bolivianos falleció luego de que se le negara la atención en el Hospital Regional de Arica Dr. Juan Noé.

Verónica Limarí Quispe y Wilmer Choque Ayno, padres del menor, que presentaba un cuadro diarreico hacía dos días, lo llevaron en primera instancia hasta la Posta de Salud Rural Sobraya, ubicada en el Valle de Azapa, donde residen.

Debido a que el diagnóstico era grave, el paramédico de turno instó a los progenitores a trasladar al bebé -identificado con las iniciales W.Ch.L.- al recinto de mayor complejidad.

"Según cuentan los padres, en la Urgencia del Hospital no lo habrían atendido porque les cobraron 30 mil pesos, por lo que regresaron a la Posta de Sobraya, donde se le volvió a atender", explicó el director Departamento de Salud Municipal de Arica, Eduardo Gutiérrez.

Según un comunicado difundido por la alcaldía, se está investigando si durante la noche la familia volvió efectivamente a la mencionada posta, "porque el mismo paramédico informó que esto no sucedió".

Lo concreto es que a las 06:30 horas del martes el lactante llegó sin signos vitales hasta la Posta de San Miguel, donde se informó su fallecimiento a Carabineros y a la Fiscalía, "que inició la investigación para esclarecer las circunstancias de la muerte de este niño boliviano".

Eduardo Gutiérrez destacó que "la ley señala que en los servicios de urgencia hospitalarios no se puede negar la atención a niños menores de un año y mujeres embarazadas".

"Será la Fiscalía la que deberá aclarar qué fue lo pasó realmente", dijo el funcionario, quien resaltó que "en la atención primaria rural se le prestó en todo momento la ayuda a este menor".

Ordenan sumario y revisión de protocolos

Respecto del aspecto más polémico del caso, la directora del Hospital Regional de Arica, Ximena Guzmán Uribe, confirmó el miércoles que los padres bolivianos concurrieron al recinto el día lunes y no se brindó atención oportuna a su hijo, por lo que se ordenó un sumario administrativo.

"(La familia) requirió atención y ahí le habrían informado que posteriormente tenía que pagar, porque no tenía previsión y la normativa nuestra es que la gente que no tiene previsión paga el arancel particular", explicó.

En definitiva, "se habría retirado sin recibir atención", dijo la directora, que confirmó la puesta en marcha de un sumario, "porque teóricamente a nadie se le niega la atención y menos se condiciona a un pago", dijo.

A partir de este caso "vamos a revisar los protocolos de cómo se atiende la gente", afirmó la facultativa, que apuntó, sin embargo, a las dificultades que impone el modelo de autofinanciamiento.

En tal sentido se están "haciendo las consultas" a la autoridad central y se pidió "a la directora del Servicio de Salud -porque ella tiene una conexión directa con el Ministerio- que nos traten de dar una normativa real de qué hacer, porque este hospital es autofinanciado".

"Eso significa que nosotros tenemos que cobrarle a alguien lo que hacemos para, con ese mismo dinero, cobrar sueldos, reinvertir, mejorar los equipos y la atención", explicó.

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