Luego de que una ciudadana brasileña identificó a ocho efectivos policiales que trabajaban en la carceleta de Rurrenabaque (Beni) como sus presuntos violadores, la Fiscalía no descartó ordenar la detención preventiva de los uniformados mientras se investiga el caso.

El director nacional de la fuerza anticrimen, William Cordero, indicó que se investiga el grado de participación de los uniformados y que por lo pronto ya fueron retirados de la institución.

“Si la víctima desestima el caso, seguiremos indagando y en los próximos días tendremos resultados de las pericias”, dijo.

Asimismo, el Ministerio de Justicia se sumará a la pesquisa para que los autores de la violación sean sancionados. Se conoció que la carceleta incluso era usada como lenocinio y que uniformados de otras unidades policiales acudían a estas instalaciones para vejar a la ciudadana extranjera.

Se conoció además que otros hechos similares se habrían producido en el área rural, por lo que una comisión de fiscales comenzó una investigación. Ante eso, el presidente de la Cámara de Diputados, Víctor Borda, pidió una “profunda investigación” de los hechos.

“La institución policial se ve apañada por las últimas denuncias de corrupción y de violación. Como sociedad exigimos que se investigue profundamente estos hechos y se castigue ejemplarmente a los responsables de estos ilícitos”, señaló.