El juzgado 2do público mixto y cautelar del plan 3000 condenó a 30 años de cárcel en el penal de Palmasola, a Juan Carlos Justiniano, por el delito de infanticidio de su hijastro de siete meses, el padrastro confesó el crimen y se sometió a un proceso abreviado. La madre del niño, Sayurdi Rivas Justiniano, fue condenada a dos años de cárcel por el delito de Encubrimiento.

“Ambos ciudadanos fueron acusados por el delito de Infanticidio y Complicidad, tras el fallecimiento del menor de siete meses de vida, producto de violencia ejercida por parte del padrastro, el informe forense indica: trauma encéfalo craneal (TEC) grave, muerte encefálica”, según el informé de la Fiscalía Departamental de Santa Cruz, Mirael Salguero Palma.

La denuncia se presentó el 7 de noviembre del 2018, contra la madre del niño por el delito de Lesiones Graves y Leves, cuando el bebé fue internado en el hospital Japonés por un traumatismo cráneo encefálico que le causó la muerte; según el informe forense, el bebé también presentaba una fractura de clavícula de data anterior, además de síndrome de bebé sacudido, una lesión cerebral que se produce por sacudir violentamente a un niño pequeño.

En principio, la madre aseguró que el menor cayó de una cama al piso de cemento golpeándose la cabeza, hecho que le produjo convulsiones y pérdida de conocimiento, posteriormente el menor fue trasladado a emergencias del hospital; sin embargo tras tomar la declaración ampliatoria, confesó que uno de sus familiares vio que su pareja lo golpeó.

El hombre fue detenido y terminó confesando que le dio “dos manazos para que se calle”, se sometió a juicio abreviado y fue condenado a 30 años de cárcel.