La Policía aprehendió a la esposa, hija y trabajadora del hogar de "El Killer" por encubrimiento
El domingo, en un operativo que contó con 80 uniformados, la Policía capturó a Felipe Froilán Molina, en un domicilio de la zona Cota Cota, al sur de la ciudad de La Paz, donde estaba escondido en el tumbado del inmueble, que tenía una pared falsa.
La Paz, 1 de febrero (ABI).- El ministro de Gobierno, Carlos Romero, informó el lunes que durante la captura de Felipe Froilán Molina, alias "El Killer", sentenciado a 30 años de cárcel por el asesinato del líder socialista Marcelo Quiroga Santa Cruz, fueron aprehendidas su esposa, hija y la trabajadora del hogar, por los delitos de encubrimiento, complicidad y obstrucción a la justicia.
"Se procedió a la aprehensión de la esposa, hija y la trabajadora doméstica por el delito de complicidad y encubrimiento respecto del sujeto prófugo de la justicia", dijo en conferencia de prensa.
Ayer, en un operativo que contó con 80 uniformados, la Policía capturó a Felipe Froilán Molina, en un domicilio de la zona Cota Cota, al sur de la ciudad de La Paz, donde estaba escondido en el tumbado del inmueble, que tenía una pared falsa.
Romero manifestó que la Fiscalía determinará inicialmente el futuro legal de los familiares de Molina y de la doméstica.
La autoridad explicó que al momento de ser capturado, "El Killer" se mostró bastante soberbio y desafió a la Policía a la que le dijo "no les he robado nada para que me detengan".
Indicó que la investigación en general apunta a descubrir dónde se encuentran los restos de Marcelo Quiroga Santa Cruz, asesinado el 17 de julio de 1980 por el régimen dictatorial de Luis García Meza, y dependerá de las declaraciones del capturado si existen aportes en esa línea.
"Lógicamente ese es uno de los objetivos de la investigación, pero eso dependerá de las declaraciones que preste ante los fiscales, de la actitud de colaboración que pueda tener "El Killer" y eso ya escapa a la voluntad de la Policía", mencionó.
Quiroga Santa Cruz, líder del Partido Socialista Uno (PS-1), fue secuestrado en la sede de la Central Obrera Boliviana (COB), tras ser intervenida por un grupo de paramilitares al mando del dictador Luis Arce Gómez, y trasladado con vida al Estado Mayor, para asesinarlo y luego hacer desaparecer sus restos.