La Paz, 20 de agosto (ABI).- Claudia Andrea Aramayo Álvarez falleció por múltiples lesiones en el cráneo, hemorragia y otros, de acuerdo con el resultado la autopsia que práctico el jueves el forense Efraín Mariscal Palle, del Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF).

Según el informe al que accedió la ABI, Andrea Aramayo falleció por traumatismo cráneo encéfalo grave complicado con fractura de bóveda y base de cráneo asociado a una hemorragia.

Además por traumatismo cerrado de tórax grave complicado y fractura de arco costal izquierdo asociado a contusión y laceración de pulmón izquierdo.

Lo mismo, por traumatismo cerrado de abdomen y pelvis grave asociado a contusión muscular de cadera izquierda y alteración de columna dorso lumbar (desvío en el eje central).

La juez Cinthia Delgadillo ordenó el jueves por la noche una audiencia reservada para impartir en el caso del abogado y empresario William Kushner Dávalos, imputado por la Fiscalía de La Paz por el delito agravado de feminicidio a su pareja Adriana Aramayo y detenido hace más de 24 horas.

Hacia las 18h15 locales, Delgadillo abrió la audiencia con prescindencia de los medios de información, cuyos delegados aguardaban el resultado de las consideraciones a favor y contra Kushner Dávalos, constató un periodista de la ABI.

Kushner Dávalos, de 38 años, fue imputado por feminicidio y arriesga una condena a 30 años de presidio sin derecho a indulto.

En medio de una serie de especulaciones sobre cómo se registró la muerte violenta de Andrea Aramayo, la noche del lunes al martes, en las puertas de un pub en cuyo interior ella y Kushner Dávalos discutieron acaloradamente, las autoridades aguardaban dos pruebas contundentes, la autopsia y las imágenes de una cámara de seguridad.

Ambos aportes aclararán si Andrea Aramayo se resbaló y golpeó la cabeza cuando corría para evitar que Kushner Dávalos se montara en su coche y la dejara, tal como sostiene la defensa del imputado o, por el contrario, éste la arrolló premeditadamente y luego la pasó con la vagoneta hasta provocarle una fragmentación del cráneo, tal como sostiene la familia de la mujer que iba a cumplir 28 años y que dejó en la orfandad a una niña de 8 años.

Varios centenares se apostaron en la calle que da a las oficinas donde Delgadillo juzga a Kushner Dávalos, en el centro de La Paz, en demanda de justicia.