Hace dos semanas, el vicepresidente del Estado, David Choquehuanca, tras la “Gran Marcha en Defensa de la Democracia”, convocada por la Central Obrera Boliviana (COB) y el Pacto de Unidad, entre otras organizaciones sociales, acusó a Evo Morales de haber “cruzado ríos de sangre” y “quebrar su lugar su lugar en la historia” al conformar una “troika opositora” junto a Luis Fernando Camacho y Carlos Mesa.