La Paz, 30 de junio (Oxígeno).- La Plataforma de Luchadores Sociales y Sobrevivientes de las Dictaduras también solicitó la beatificación para el mártir de la democracia, Luis Espinal, ante la visita del papa Francisco a Bolivia. Ese pedido se suma a la campaña impulsada por la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (APDHB).

Jorge Peláez, vicepresidente de la plataforma, aseguró que al igual que la APDHB se mandó una carta con la petición al Ejecutivo de la Conferencia Episcopal de Bolivia (CEB), Aurelio Pesoa.

“Hemos enviado la carta al arzobispo Pesoa de la CEB y hemos encargado de la visita del Santo Padre. Estamos a la espera de la respuesta para que interceda ante nuestro pedido. Hemos enviado como plataforma nuestras propias cartas”, recalcó Peláez al periódico digital Oxígeno.bo.

El domingo, la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia activó una campaña para que se inicie el proceso de beatificación. La presidenta de la APDHB, Yolanda Herrera,  manifestó que existen las suficientes pruebas, entre fotos y documentos, para probar que la lucha de Espinal fue por los pobres y los más desposeídos.

Al respecto, Peláez indicó que la Plataforma de Sobrevivientes de la Dictadura tiene también fotos y papeles que ayudarán a conseguir ese objetivo.

“Tenemos documentos, fotos, papeles y recortes de notas de prensa que son prueba suficiente para que el sacerdote Luis Espinal sea beatificado, por su fe, su lucha y compromiso con los pobres, dando su vida. No fue justo la manera en cómo murió  ante los paramilitares”, indicó Jorge Peláez.

A su llegada a La Paz, Francisco tiene previsto ir al lugar donde el sacerdote jesuita fue encontrado muerto, en el Kilometro 8 camino a Chacaltaya, ahora la autopista La Paz - El Alto para rendirle un reconocimiento.

El sacerdote jesuita, Luis Espinal Camps, fue cineasta y comunicador, es reconocido por los bolivianos por su compromiso con las luchas sociales de los movimientos populares en el país y por hacer frente a la violencia política.

La noche del 21 de marzo de 1980,  Espinal Camps fue detenido, torturado y asesinado por paramilitares que respondían al exdictador Luis García Meza.

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