El ministro de Hidrocarburos y Energías, Alejandro Gallardo, posesionó este lunes a Ariel Sandy Sánchez como nuevo presidente interino de ENDE Corporación y le encomendó dar continuidad a la planificación estratégica del sector eléctrico, en el marco de la transición energética.

“Nuestro mandato, emanado del presidente Luis Arce, es claro: Asegurar la energía para todas y todos, cerrar la brecha campo-ciudad y avanzar hacia una matriz limpia que garantice el desarrollo económico”, afirmó en el acto de posesión.

La nueva autoridad asumió el cargo con el reto de dar continuidad a la política estratégica y acelerar los proyectos de expansión y modernización de ENDE.

“Trabajaremos junto al Gobierno para que cada boliviano sienta los beneficios de la energía limpia, segura y accesible”, afirmó.

Según información oficial del Gobierno, la política energética boliviana está apoyada en cinco ejes:

1. Seguridad energética: garantizar un suministro continuo y confiable a la población
2. Cobertura rural: ampliar el servicio eléctrico mediante el Programa de Electrificación Rural III y el IDTR
3. Sistema robusto y de calidad: fortalecer las redes para hogares, industria y comercio, asegurando la estabilidad del Sistema Interconectado Nacional
4. Industrialización con sustitución de importaciones: convertir la energía en motor de la producción interna y de la competitividad económica
5. Transición energética: pasar de un 67 % de generación térmica a un 75% de fuentes renovables (solar, eólica, hidráulica) hacia 2050.

Gallardo, en ese sentido, subrayó la ventaja geopolítica del país para la integración eléctrica regional.

Tras la línea de exportación eléctrica Juan Azurduy con Argentina, Bolivia busca interconexiones similares con Brasil, Paraguay y otros vecinos, “para intercambiar energía y generar divisas, especialmente a partir de renovables”, puntualizó.