La Fiscalía, admitió la denuncia presentada por el Gobierno boliviano en contra de Evo Morales, y otros dirigentes, por delitos vinculados a los bloqueos que afectan al país hace 8 días.

La denuncia fue presentada, en representación del Gobierno, por el ministro de Justicia, César Siles, el 5 de junio, en contra de Morales y una de sus principales asistentes, Suseth Rodríguez, por los delitos de terrorismo, instigación pública a delinquir, atentados contra la seguridad de los servicios públicos, atentado contra la seguridad de los transportes, atentado contra la libertad de trabajo, desobediencia a resoluciones constitucionales, destrucción y deterioro de bienes del estado, y obstrucción de procesos electorales.

“El Ministerio Público, en el marco de la objetividad y de la independencia de los fiscales analistas, ha determinado admitir esta denuncia que se encuentra en el departamento de La Paz por ciertos tipos penales que ha denunciado el Ministerio de Justicia”, confirmó este lunes el fiscal general del Estado, Roger Mariaca.

Eso sí, el Fiscal no especificó por la cantidad de delitos que se aceptó la denuncia contra Morales.

Señaló que se inició una investigación a cargo de los fiscales de materia y la Policía boliviana para esclarecer la denuncia realizada.

Morales y Rodríguez son identificados como los que ordenaron cercos y bloqueos de caminos para forzar la habilitación de la candidatura del expresidente, pese a no contar con un partido con personería vigente y estar inhabilitado por fallos constitucionales que limitan la reelección continua y discontinua.

De hecho, la pasada semana pasada Rudy Casquite, quien se identificó como un dirigente evista, denunció ante la prensa que Morales instruyó a sus dirigentes convulsionar el país y cercar las ciudades, específicamente La Paz, en busca de forzar su candidatura a la presidencia.

Casquite reveló un audio – auténtico según el estudio de diversas verificadoras- en el que se escucha a Evo señalar que se encuentra en la “batalla final” y que esta semana “la situación va a empeorar”.

“Es con todo hermano, es la batalla final, nos gana o perdemos (ganamos o perdemos)”, indica Morales en el audio.

Además resalta la importancia de cerrar la salida a los Yungas, hacia el lago Titicaca y Desaguadero. “Si La Paz no encabeza esto, no va a haber”, afirmó.

Rudy Casquite, en ese sentido, también denunció que Morales instruyó cercar “Cochabamba, a Santa Cruz (…) Pero como prioridad tiene La Paz, la Sede de Gobierno”.

De hecho, en los puntos de bloqueo evista se generaron actos de violencia contra la población, se atacaron a tres ambulancias y dejaron a menos 50 personas heridas, entre ellas policías y personal de salud.

Morales, cabe recordar, está atrincherado en el Trópico de Cochabamba para evitar ser aprehendido por el caso de trata y tráfico de personas que se sigue en su contra.