El juez de Instrucción Penal Anticorrupción y Contra la Violencia de Tarija decidió suspender la audiencia de medidas cautelares que se sigue contra Evo Morales, por el delito de trata y tráfico de personas, hasta el viernes 17 de enero.

La decisión se debe a que Morales no asistió a la audiencia y, mediante su defensa, alegó tener problemas de salud. La autoridad jurisdiccional ordenó que se realicen evaluaciones médicas al dirigente cocalero para corroborar su justificación.

La fiscal departamental de Tarija, Sandra Gutiérrez, afirmó que se pidió que un médico forense del IDIF realice la evaluación al expresidente y los resultados deben presentarse en las próximas 48 horas.

“Hemos pedido la valoración medica que se la va a hacer en el lugar donde se encuentra, hemos pedido que un médico forense del IDIF haga la valoración de las evaluaciones especificas que ha ordenado el juez (…) Supuestamente (Morales) tendría enfermedades de base y otras dos enfermedades”, señaló Gutiérrez.

Afirmó que Morales deberá presentarse a su audiencia el próximo viernes y si no lo hiciese, insistió, se le declarará en rebeldía, como, dijo, pasó con la madre de la supuesta víctima.

“Si no se presenta va a ocurrir lo mismo que ha ocurrido con la madre, declararlo rebelde, el arraigo, se emite el mandamiento de aprehensión y la anotación preventiva de sus bienes”, afirmó.

Morales fue imputado formalmente por el delito de trata y tráfico de personas con agravante por haber mantenido una relación y haber embarazado a una joven menor de edad años atrás, según la Fiscalía.

Por eso, el expresidente tiene una orden de aprehensión y una alerta migratoria en su contra.