Seguidores de Evo Morales reforzaron la “seguridad” para evitar la aprehensión de su líder y este martes cerraron los accesos a la sede de los cocaleros en el Trópico de Cochabamba.

Según reporte de Unitel, Lauca Ñ amaneció con varias avenidas y calles con promontorios de tierra y hasta la carretera troncal que pasa por este municipio está cerrada.

Además, se observa mayor presencia de la "seguridad sindical" y todos las rutas que conducen a la sede de las Seis Federaciones del Trópico de Cochabamba están con tierra, piedras, además de banderas del Estado y el Movimiento al Socialismo (MAS).

El accionar se da el día en el que se desarrolla la audiencia de medidas cautelares por el caso de trata y tráfico de personas que se sigue contra Morales en el departamento de Tarija.

Morales ya fue imputado formalmente por el mencionado delito por haber mantenido una relación y haber embarazado a una joven menor de edad años atrás, según la Fiscalía.

Por eso, el expresidente tiene una orden de aprehensión y una alerta migratoria en su contra.

No obstante, Morales no asistió a la audiencia de este martes y uno de sus abogados, Jorge Pérez, alegó que el dirigente cocalero está en “total indefensión” y hasta habría señalado que al ser una persona de la tercera edad debe preservar su vida.

Además, la defensa de Morales había señalado que su cliente no fue debidamente notificado respecto a la audiencia, ya que se le comunicó mediante edicto y no de forma presencial.

La Fiscalía Departamental de Tarija, entretanto, había alertado que si Morales no se presentaba a su audiencia sería declarado en rebeldía y se emitiría una nueva orden de aprehensión en su contra.