La ministra de la Presidencia, María Nela Prada, acusó a Evo Morales de incumplir su palabra en el encuentro multipartidario que pactó la suspensión de las elecciones primarias en las organizaciones políticas, por anteponer “sus intereses políticos e electoralistas”.

Durante el Encuentro Multipartidario e Interinstitucional, organizado por el Tribunal Supremo Electoral (TSE), aceptó inicialmente apoyar la suspensión de las primarias, pero después puso la condición de que también se reconozca el observado congreso de octubre de Lauca Ñ, donde fue elegido jefe del MAS y candidato presidencial, o se eliminen los plazos para la renovación de las directivas de las organizaciones políticas.

No obstante, expresó su confianza de que el resto de actores políticos viabilice el cumplimiento de los acuerdos de este miércoles.

“Esperemos que parte de lo que hoy se habló vinculado a las elecciones primarias se cumpla”, afirmó como parte de la palabra empeñada. “Ahí estamos viendo que Evo no tiene palabra, que él en realidad dice que está de acuerdo en que se suspenda las elecciones primarias, pero que condiciona al final”.

En representación del Órgano Ejecutivo, Prada asistió al Encuentro Multipartidario e Interinstitucional por la Democracia que reunió a los jefes de las 11 organizaciones políticas, dirigentes de las dos alianzas políticas con representación en la Asamblea Legislativa (Comunidad Ciudadana y Creemos), representantes de los órganos Ejecutivo y Legislativo y de las organizaciones sociales.

Resultado de ese encuentro se emitió la Declaración por la Democracia que consta de 12 puntos, entre ellos la petición unánime a la “Asamblea Legislativa Plurinacional de aprobar una ley que suspenda las elecciones primarias para la gestión 2024 y retomar un análisis de su implementación progresiva para impulsar la democracia interna en las organizaciones políticas”.

En el encuentro que se extendió por más de cuatro horas, Morales sugirió en un inicio que se mantenga las elecciones primarias cerradas y luego aceptó suspender este proceso para no poner en risego las elecciones judiciales para conformar el Órgano Judicial y el Tribunal Constitucional Plurinacional.

No obstante, cerca del final del encuentro, momento antes de firmar el documento, el expresidente condicionó su rúbrica a que el TSE reconozca su fallido congreso de octubre de 2023 en Lauca Ñ, donde fue reelecto presidente del MAS y lo proclamaron como candidato presidencial. Caso contrario exigió suspender los plazos para la renovación de directivas de las organizaciones políticas.

“El MAS va a estar en el acuerdo (que establece) que se eliminan las primarias con la condición de que se respete el congreso de Lauca Ñ, respeten ustedes (el TSE) el informe legal o finalmente no se hagan más congreso de ningún partido hasta que pasen las elecciones nacionales”, planteó Morales, quien se resiste a dejar la presidencia del MAS.

La propuesta de Morales fue objetada por los dirigentes de las organizaciones políticas. Por ejemplo, el jefe de Unidad Cívica Solidaridad (UCS), Jhonny Fernández, consideró fuera de lugar la petición del expresidente porque, además, todas las organizaciones políticas deben cumplir con las determinaciones del TSE, y no tener tratos especiales.

Ante la negativa mayoritaria, Morales dejó el encuentro y no firmó la Declaración por la Democracia, tampoco participó de la conferencia que dio el presidente del TSE, Óscar Hassenteufel.

Prada reprochó que el expresidente actúe como un “niño malcriado” que, porque el resto de los participantes no aceptó su “capricho”, decida no firmar el documento.

“Aquí, la única persona que se levantó como un niño malcriado fue Evo al no dársele el gusto entre todos de que se ponga el párrafo para seguir prorrogándose dentro de la directiva del Instrumento Político”, cuestionó la ministra.

Lo acusó de demostrar una vez más “que no tiene la capacidad para contrarrestar ideas, posiciones, escuchar al otro y llegar a determinados consensos” en beneficio de la democracia y en beneficio del pueblo boliviano, sino de anteponer “sus intereses políticos, electoralistas”.

Pese a esa postura, Prada confía en que el resto de los actores que firmaron la declaración cumpla con los compromisos asumidos que, además, incluye garantizar las elecciones judiciales y los comicios generales de 2025.

“El resto (de los participantes) han expresado el acuerdo y el consenso en este diálogo auspiciado por el Órgano Electoral por nuestra democracia”, indicó.