Arce en el ALBA- TCP: “Rechazamos categóricamente la narrativa de que no hubo un Golpe de Estado en Bolivia”
Las redes sociales están jugando un papel crucial de la difusión de noticias falsas. La polarización de la vida política promoviendo el falso discurso de un autogolpe, la desinformación y las campañas orquestadas buscan erosionar la confianza en el Gobierno legítimo y constitucional”, afirmó en la Cumbre Extraordinaria del ALBA-TCP.
El presidente del Estado boliviano, Luis Arce, durante su intervención en la Cumbre Extraordinaria del ALBA-TCP, expresó su “rechazo categórico” a la narrativa de que no hubo un Golpe de Estado militar en Bolivia y afirmó que la narrativa que lo acusa de gestar un autogolpe solo busca desprestigiar y deslegitimar al Gobierno.
“Rechazamos categóricamente la narrativa de que no hubo Golpe de Estado Militar (…) Quienes promueven esta narrativa representan intereses ajenos al gobierno, al Estado y al pueblo”, aseveró Arce.
El Jefe de Estado, en ese sentido, alertó que se gesta un plan para impulsar la idea de un autogolpe sobre todo mediante el uso de las redes sociales.
“Las redes sociales están jugando un papel crucial de la difusión de noticias falsas. La polarización de la vida política promoviendo el falso discurso de un autogolpe, la desinformación y las campañas orquestadas buscan erosionar la confianza en el Gobierno legítimo y constitucional”, afirmó.
La Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) es integrada por Cuba, Bolivia, Venezuela, Nicaragua, Mancomunidad de Dominica, Antigua y Barbuda, San Vicente y las Granadinas, Grenada, Federación de San Cristóbal y Nieves, y Santa Lucía.
Arce, en ese sentido, expuso que producto del fallido Golpe de Estado “hay más de 100 involucrados de distinto grado entre militares activos, pasivos y civiles”.
“La justicia ha determinado detención privativa de libertad y detención domiciliaria en función de lo que establece la ley”, explicó sobre las investigaciones de la asonada golpista conducida por el excomandante del Ejército Juan José Zúñiga.
La tarde del 26 de junio militares y tanquetas tomaron la plaza Murillo, centro del poder político, con el objetivo de tomar el poder. La intentona golpista se diluyó después de que Arce – quien tuvo un careo con Zúñiga- posesionará a un nuevo alto mando militar.
Las investigaciones establecieron que el plan golpista fue planificado desde mayo, y que incluso Zúñiga ya tenía su gabinete ministerial y discurso de toma de poder. Planeaban convocar a elecciones en tres meses y liberar a los que consideraban presos políticos, entre ellos a la expresidenta Jeanine Áñez y al suspendido gobernador de Santa Cruz Luis Fernando Camacho.
“La derecha y el nacionalismo conservador buscan imponer la matriz de que no fue golpe, sino autogolpe, como impusieron la narrativa de que no fue golpe sino fraude el derrocamiento del entonces presidente Evo Morales en 2019. En ese sentido, es fundamental recuperar los valores democráticos del Estado de Derecho y rechazar los fundamentalismos y caudillismos”, afirmó.
En su discurso, el Presidente boliviano también agradeció el respaldo de la comunidad internacional frente a la “asonada golpista” que al momento tiene a 23 militares y 2 civiles detenidos por los delitos de alzamientos armados contra la seguridad y soberanía del Estado, terrorismo, atentados contra la seguridad del presidente y otros dignatarios de Estado, destrucción o deterioro de bienes del Estado y la riqueza nacional, y uso indebido de bienes y servicios públicos.
“El ALBA-TCP hoy más que nunca debe unirse para mantener la paz en América Latina, como el pilar fundamental del desarrollo. No dejemos pasar este y ningún intento de golpe de Estado. La paz y la justicia social deben prevalecer por sobre los intereses imperialistas, fascistas y cualquier forma de opresión”, concluyó el Jefe de Estado.