La oposición del Gobierno de Chile, al igual que lo hiciera el Ejecutivo de Argentina, reaccionó al acuerdo firmado entre Bolivia e Irán el año pasado – un memorando de entendimiento en materia de defensa- y expresaron que la cercanía entre ambos países es un “problema grave” para la seguridad de su país.

El primero en pronunciarse fue el líder del Partido Republicano José Antonio Kast Rist, quien a través de sus redes sociales indicó que “Irán lanza un ataque con drones y misiles sobre Israel. Podrían ser los mismos drones que les regaló a Bolivia para vigilar nuestras fronteras”.

“Irán lanza un ataque con drones y misiles sobre Israel. Podrían ser los mismos drones que les regaló a Bolivia para vigilar nuestras fronteras. Chile tiene un problema grave de seguridad nacional y tenemos un gobierno débil e inexperto para enfrentarlo”, señaló a través de cuenta en la red social X.

Desde el partido Demócratas de Chile, su vicepresidente Gabriel Alemparte también lanzó la alerta al gobierno de Boric sobre la “influencia” de Irán sobre Bolivia y Venezuela.

“La República Islámica de Irán es un problema para la seguridad exterior de Chile. Su influencia en Bolivia y Venezuela es evidente y muy peligrosa a los intereses de Chile. El gobierno debe ser extremadamente cauto y tomar resguardo”, publicó en la misma red social.

Lo expresado por la oposición chilena va en la misma línea de la posición del gobierno de Javier Milei en Argentina. La ministra de Seguridad de ese país señaló el fin de semana que su país está en máxima alerta en la frontera con territorio boliviano, precisamente, por sus acuerdo con Irán.

La autoridad argentina incluso señaló que fruto de ese memorándum  fuerzas combatientes iraníes, llamadas Quds, estarían en el país boliviano.

“Ese pacto permitió la presencia de miembros iraníes de las fuerzas Quds, que son fuerzas combatientes e integran las ramas armadas de Irán, en el territorio”, dijo.

En ese sentido, señaló que su país también investiga si “hay personas que no hablan español y que tienen pasaporte boliviano”.

La Cancillería boliviana ya rechazó tales declaraciones de Bullrich y reiteró que es un Estado pacifista.

“Desmentimos y rechazamos enfáticamente que Bolivia proteja en sus fronteras a personas que siembren el terror, la inseguridad y la zozobra. Estas acusaciones carecen de evidencia o documentación y se realizan sin fundamento alguno”, señaló la Cancillería.

En ese sentido, la Cancillería reiteró que Bolivia es un Estado pacifista y afirmó que la relación con Argentina “son más fuertes y sólidas que las desafortunadas expresiones de funcionarios circunstanciales del gobierno argentino”.