El Magisterio urbano, tras una conferencia nacional, decidió retomar sus movilizaciones – posiblemente después del 6 de junio- y buscará alianzas estratégicas con otros sectores que también tengan demandas no atendidas por el Gobierno.

En contacto con Erbol, la dirigente del magisterio de Cochabamba, Griselda Torres, afirmó que en la conferencia los maestros decidieron ir a una “segunda batalla”.

La dirigente Torres señaló que para las nuevas movilizaciones se buscará sumar a otras organizaciones en torno a demandas comunes, como el rechazo a la jubilación obligatoria, la mejora salarial y la administración de la Gestora Pública.

Asimismo, explicó que parte de los profesores añadieron otras demandas como el ascenso automático, que ya está contemplado en norma, y que se llame al examen de ascenso de categoría.

Los maestros urbanos suspendieron sus medidas de presión el 5 de mayo, luego de dos meses de movilización. Marchas, bloqueos, huelgas de hambre, tapiados y hasta el paro de sus servicios fueron parte de su estrategia.

Los maestros exigen al Gobierno principalmente cinco demandas: la anulación de la actualización curricular, reparación de la deuda histórica, mayor cantidad de ítems, la realización un congreso educativo y mayor presupuesto para el sector.

El Ministerio de Educación, como parte de la solución, dispuso que la actualización curricular ya no sea obligatoria, asignar 16 mil nuevas horas al sector – 8 mil para la Magisterio urbano y 8 mil para el Rural- y que el Congreso Educativo se desarrolle el 2024 para que en ese espacio se discuta el tema del presupuesto.