Después del fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) sobre el Silala, el presidente de Chile, Gabriel Boric, afirmó que su país desea seguir trabajando con Bolivia “con un espíritu de buena vecindad”.

"La voluntad de nuestro país es, de aquí en adelante, continuar trabajando con la hermana república de Bolivia, con un espíritu de buena vecindad, de colaboración e integración en todos los temas que lo requieren, profundizando nuestros lazos y dando continuidad al trabajo que se inició durante el Gobierno anterior, en lo que se conoce como la agenda de los 12 puntos", aseguró Boric.

Asimismo, el Presidente chileno analizó el fallo de la CIJ y afirmó que fue un “resultado categórico” a favor de su país.

"El fallo ha sido categórico, Chile fue por certeza jurídica y la obtuvo", enfatizó.

Expuso que, "en primer lugar, se confirma que el río Silala es un curso de agua internacional, y cuyo uso en su integridad se encuentra regido por el derecho internacional consuetudinario".

"Chile planteó su pretensión de reconocimiento de 100 años de prácticas del uso conjunto razonable y equitativo, razonable (...) y durante el proceso judicial, Bolivia fue poco a poco reconociendo las posiciones chilenas y allanándose a las mismas", subrayó.

En ese marco, en el fallo, dijo, también "se reconoce que el uso que históricamente que ha hecho y hace Chile de las aguas del Silala está conforme al uso equitativo y razonable que establece el derecho internacional", además de que "Chile no debe compensación alguna a Bolivia por el uso que ha hecho de las aguas del Silala".

El Presidente chileno  relevó igualmente que "se confirma que existe un deber de cooperación respecto del uso de las aguas ante la existencia de un posible daño significativo".

"Nuestro país puede estar tranquilo con la sentencia de la Corte. Los temas en disputa han quedado resueltos de manera definitiva bajo el derecho internacional y conforme a las pretensiones de Chile", expresó.