Censo: La Iglesia exhorta a un diálogo “sincero, abierto y sin condicionamientos”
La Iglesia llamó a las partes en conflicto a que “anteponiendo todo interés personal, puedan instaurar un espacio de diálogo sin condicionamientos, evitando enfrentamientos como también perjuicios a la población y por el contrario se busquen soluciones en bien de todos”.

A través de un pronunciamiento, la Iglesia Católica, representada por la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB), exhortó este miércoles a un diálogo “sincero, abierto y sin condicionamiento” sobre el censo.
En el texto, la Iglesia afirma que la realización del censo es un deseo de toda la población boliviana; sin embargo, llama al diálogo para definir la fecha de su realización, ante las protestas y amenazas de medidas de presión por parte de grupos que piden que la consulta nacional sea adelantada al 2023.
“Estamos convencidos que el único camino para la solución de conflictos sea el diálogo sincero y abierto, y la concertación, fomentando una cultura de la escucha y buscando el bien común”, señala el texto.
Por eso, la Iglesia llama a las partes en conflicto a que “anteponiendo todo interés personal, puedan instaurar un espacio de diálogo sin condicionamientos, evitando enfrentamientos como también perjuicios a la población y por el contrario se busquen soluciones en bien de todos”.
Así, la Iglesia se unió a la Defensoría del Pueblo en su pedido de que se pueda instaurar el diálogo respecto al censo.
El Comité Interinstitucional cruceño, a la cabeza del gobernador Fernando Camacho, el cívico Rómulo Calvo, y el recto de la UAGRM, Vicente Cuéllar, amenazan con activar un paro indefinido en Santa Cruz a partir del 22 de octubre en caso de que el Gobierno no ceda y abrogue el Decreto que marca que el censo se realizará el 2024.
La postergación del censo fue definida en una reunión entre el presidente del Estado, Luis Arce, y el Consejo Nacional de Autonomías. Del encuentro participaron ocho de los nueve gobernadores del país, siendo el único ausente Fernando Camacho.