El ministro de Justicia y Derechos Humanos de Argentina, Martín Soria, afirmó hoy que “a esta altura no quedan dudas” de que hubo un envío irregular de material represivo por parte del gobierno de Mauricio Macri a Bolivia durante noviembre de 2019 – en la gestión transitoria de Jeanine Añez- y consideró que la maniobra constituye "un hecho de una gravedad nunca antes vista".

"Creo que a esta altura ya no quedan dudas. De todas formas, hay que esperar la conferencia de prensa de las autoridades de la policía de Bolivia, que ayer anunciaron haber encontrado un depósito lleno de armas y de municiones para ver si una parte de esos materiales pertenece a ese envío. Es algo que se hizo durante el Gobierno del (expresidente) Mauricio Macri de forma clandestina, de contrabando”, comentó el funcionario en diálogo con la radio AM 750.

En tanto, el Gobierno argentino presentó el lunes una denuncia contra Macri y una decena de funcionarios de la gestión Cambiemos por el envío de armamento y municiones a Bolivia, que se presume fue usado en las ‘masacres’ de Senkata (El Alto) y Sacaba (Cochabamba) ordenado por el Gobierno de Jeanine Añez.

En ese marco, Soria indicó que Macri podría ser requerido para declarar en Bolivia, donde hay “una investigación mucho más avanzada” y varias personas están detenidas por su implicación con el presunto golpe de Estado, como la expresidenta Jeanine Áñez o el excomandante de la Fuerza Aérea Boliviana, Jorge Gonzalo Terceros Lara.

“Es la primera vez que un presidente argentino envía armas y municiones para sostener un golpe de Estado en un país hermano. Es una gravedad nunca antes vista. Por algo el Presidente Alberto Fernández pidió disculpas directamente al pueblo de Bolivia”, remarcó.

La polémica surgió la anterior semana, cuando el canciller del Estado, Rogelio Mayta, reveló una nota de agradecimiento enviada por el excomandante de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB), el general Jorge Gonzalo Terceros Lara, al entonces embajador argentino Norberto Álvarez García, en noviembre de 2019.

La carta está fechada el 13 de noviembre de 2019, día que asumió como presidenta interina la senadora Jeanine Áñez (2019-2020) y dos días después de que se viera obligado a dimitir el expresidente Evo Morales (2006-2019) tras el pedido de las Fuerzas Armadas por denuncias de irregularidades de la Organización de los Estados Americanos en las elecciones que le dieron la reelección presidencial.

Según el documento, el armamento enviado consistió en 40.000 cartuchos de balas de goma AT 12/70 (antitumulto), 18 gases lacrimógenos en spray MK-9, cinco gases lacrimógenos en spray MK-4, 50 granadas de gas CN, 19 granadas de gas CS y 52 granadas de gas HC.