España rechaza las acusaciones del Gobierno y expulsa a 3 diplomáticos bolivianos
Después de recordarle al gobierno boliviano que cerca de 200.000 ciudadanos bolivianos viven en España, el gobierno español le exige que reconduzca sus afirmaciones y se recupere la confianza y cooperación.

El gobierno de España decidió expulsar de su país a tres diplomáticos bolivianos acreditados en Madrid como respuesta a la decisión del Gobierno de Jeanine Añez de expulsar a la encargada de negocios de España en Bolivia, Cristina Borreguero, y del cónsul de España en Bolivia, Álvaro Fernández.
"En reciprocidad al gesto hostil del Gobierno interino de Bolivia de declarar como persona non grata a dos diplomáticos españoles, España ha decidido, a su vez, declarar persona non grata a tres miembros del personal diplomático y consular boliviano acreditado en nuestro país y darles un plazo de 72 horas para abandonar España", dice el comunicado del gobierno español.
Según el comunicado, España rechaza "tajantemente" cualquier insinuación sobre una supuesta voluntad de injerencia en los asuntos políticos internos de Bolivia; en referencia a la denuncia de autoridades bolivianas que consideran que diplomáticos españoles pretendían ayudar a huir a las exautoridades bolivianas, refugiadas en la embajada de México.
"Para España, cualquier afirmación en este sentido constituye una calumnia dirigida a dañar nuestras relaciones bilaterales con falsas teorías conspiratorias. La relación entre nuestros dos países se basa en el mutuo respeto a nuestras instituciones democráticas y esta será siempre la referencia en nuestras actuaciones", dice el texto.
Después de recordarle al gobierno boliviano que en la actualidad cerca de 200.000 ciudadanos bolivianos viven en España, el gobierno español le exige que reconduzca las afirmaciones vertidas por sus autoridades y así se pueda recuperar la confianza entre ambos países.
"En este sentido, España exige que el actual gobierno interino de Bolivia reconduzca y desescale los contenidos de sus afirmaciones y se recupere cuanto antes el buen sentido de confianza y cooperación entre nuestros dos países, tan necesario ahora como siempre", dice el documento publicado por el gobierno de España.
Después del incidente ocurrido el viernes pasado, el expresidente y delegado especial de Bolivia ante la comunidad internacional, Jorge Tuto Quiroga, denunció que los gobiernos de España y México intentan conspirar contra la reconstrucción democrática de Bolivia y los acusó que estar al servicio de los gobiernos de Cuba y Venezuela; y llamó "padrinos de tiranos" a los presidentes López Obrador (México) y Pedro Sánchez (España).