El canciller del Estado, Diego Pary, y el ministro de Justicia, Héctor Arce, viajarán a Washington, Estados Unidos, para dar una explicación detallada, mañana, jueves, del proceso electoral boliviano ante la Asamblea Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA).

Así lo anunció el embajador de Bolivia ante la OEA, José Alberto Gonzales, en la sesión extraordinaria que desarrolló esta mañana el Consejo Permanente de ese organismo internacional.

Según manifestó Gonzales, el canciller del Estado solicitó que la sesión de hoy se suspenda hasta mañana, debido a que no pudo llegar a EEUU por falta de combinaciones áreas.

No obstante, el Consejo sesionó igualmente y señaló que mañana desarrollará una nueva sesión extraordinaria para conocer la posición de las autoridades bolivianas.

Aun así, Gonzales dio una leve explicación de lo que fue la jornada electoral boliviana y, sobre todo, explicó algunos detalles de la Transmisión de Resultados Preliminares Electorales (TREP).

En primer lugar, Gonzales dejó en claro que el TREP no muestra los resultados oficiales del proceso, sino que son resultados preliminares.

Asimismo, desmintió que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) se haya comprometido a difundir el 100%b de los resultados del TREP. Señaló que el compromiso de esa institución era llegar al 80% de los resultados preliminares, hecho que se cumplió el mismo domingo de las elecciones en horas de la noche.

“Cuatro días antes el TSE anuncio que el TREP solo iba a realizar el conteo hasta el 80% de los votos, nunca se ofreció que iba a llegar al 100%”, aseveró.

Por otro lado, el Embajador de Bolivia ante la OEA también se refirió a la renuncia del vocal Antonio Costas al TSE.

Recalcó que el propio Costas, después de presentar su renuncia, aseguró que los resultados tanto del TREP como del cómputo oficial son legítimos y confiables y que su renuncia se debió únicamente a que el TREP fue suspendido.

Finalmente, Gonzales también solicitó a la OEA pronunciarse respecto a los hechos de violencia protagonizados por protestantes que, incluso, destrozaron y quemaron oficinas de distintos Tribunales Electorales Departamentales.