El representante legal de la Asociación Departamental de los Productores de Coca (Adepcoca), Sergio Pampa, al momento de ser trasladado a celdas judiciales de la FELCC, se declaró víctima de una persecución política de parte del Gobierno nacional.

“Es una persecución política, Bolivia lo sabe y Los Yungas lo saben”, señaló.

Aseguró que las acusaciones que pesan en su contra son falsas y un intento para “confundir a la población”.

“Quieren hacer creer a la población que contratamos sicarios o hacemos cosas malas. Totalmente falso", dijo.

Pampa, que se había declarado en la clandestinidad, fue aprehendido la tarde de este miércoles. Entretanto, la Fiscalía adelantó que pedirá la detención preventiva del líder cocalero. El fiscal departamental de La Paz, William Alave, argumentó que se pedirá que Pampa sea enviado a la cárcel debido a que existe riesgo de fuga.

El Representante Legal de Adepcoca tiene varios procesos en su contra iniciados por el Gobierno. El primero, por la presunta emboscada y ataque armado contra policías en La Asunta, en agosto de 2018, que dejó un policía fallecido y siete heridos.

También es investigado por supuestas agresiones físicas al director de la Dirección General de Comercialización e Industrialización de la Hoja de Coca (Digcoin), Martín Serrudo, el 9 de febrero en la comunidad La Calzada, La Asunta. Pampa no se presentó a brindar sus declaraciones en torno a este caso, por lo que se dictó una orden de aprehensión en su contra.

Asimismo, es investigado por el asesinato de Eduardo Apaza, secretario de Hacienda del Consejo de las Federaciones Campesinas de los Yungas de La Paz (Cofecay) en La Asunta, hecho registrado también en junio.