El Gobierno descartó cualquier posibilidad de pedir la mediación de la Iglesia o de cualquier otra institución para volver al diálogo con la Universidad Pública de El Alto (UPEA) y reiteró que la única condición para volver a la mesa de negociación es que cesen las medidas de presión que lleva adelante esa casa de estudios superiores.

En conferencia de prensa, el viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, Arturo Alessandri, lamentó que las autoridades y representantes de la UPEA rechacen la ley promulgada esta mañana que asigna Bs 70 millones adicionales a su presupuesto y reiteró que el Gobierno está abierto al diálogo.

“Ratificamos nuestra voluntad de dialogar (…) El diálogo está abierto con una condición, que cesen las medidas de presión y no necesitamos intermediarios de ninguna naturaleza, sobre todo después de que la Iglesia se ha pronunciado de éste y otros temas con carácter político”, señaló.

Además, la autoridad gubernamental también criticó que la UPEA  haya decidido radicalizar sus medidas, específicamente refiriéndose al caso del estudiante que decidió tapiarse en instalaciones de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia.

“No entendemos que frente a la flexibilidad del Gobierno, de mantener primero el diálogo, de ser flexible en el tema presupuestario, existan medidas de esta naturaleza”, señaló.

En ese sentido, criticó que el estudiante que asumió esa medida se declare como “estudiante fundador” cuando admite tener 54 años de edad y que, además, forme parte de la comisión de negociación de la UPEA.

“Un estudiante que dice llamarse Nicolás Mendoza, que reconoce tener 54 años de edad y ser fundador de la UPEA, que quiere decir que estudia 18 años en la 'U', es reconocido como parte de la comisión negociadora. Eso demuestra la irresponsabilidad de las autoridades y líderes estudiantiles y es un hecho que se suma a todos los hechos ‘sui generis’ de la UPEA”, aseveró.

Horas antes de que Alessandri saliera a dar la conferencia de prensa, la Iglesia había pedido al Gobierno convocar a un diálogo “sincero y abierto” a la UPEA, que exige la modificación de la Ley 195 de coparticipación tributaria.