El FMI mantiene en 4% la previsión de crecimiento económico para Bolivia
Bolivia tendrá el segundo mayor crecimiento de la región, solo por detrás de Paraguay, que según el FMI crecerá en un 4,5%.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) mantiene en un 4% la previsión del crecimiento económico para Bolivia durante el 2018, según la actualización de sus perspectivas económicas anunciadas. Así, Bolivia tendrá el segundo mayor crecimiento de la región, solo por detrás de Paraguay, que según el FMI crecerá en un 4,5%.
En lo que se refiere a los otros países de Sudamérica, el FMI proyecta que Perú crecerá un 3,7%; Chile, un 3,4%; Colombia, un 2,7%; Ecuador, un 2,5%; Brasil, un 2,3% y Argentina, un 2%. Entretanto que Venezuela tendrá un decrecimiento por encima del 10%.
Así, en su nuevo reajuste de pronósticos mundiales, el Fondo eleva las previsiones de crecimiento de Latinoamérica para 2018 en una décima respecto de enero, hasta el 2 %, en gran medida por el impulso de Brasil, que aumenta sus previsiones del 1,9 % al 2,3 %.
El sólido crecimiento de México, que se mantiene en el 2,3 % para este año, y la subida de los pronósticos para las economías de Chile (del 3 % al 3,4 %) y Ecuador (del 2,2 % al 2,5 %) han contribuido también a que el FMI incremente sus proyecciones para la región.
El organismo atribuye al "mayor consumo y crecimiento en inversión privada" el aumento de sus estimaciones para Brasil, que verá crecer su economía en un 2,3 % en 2018 y en un 2,5 % en 2019, datos revisados ambos al alza en cuatro décimas respecto a la anterior actualización de hace tres meses.
Después de aumentar el 1,3 % en 2017, el Fondo espera que el crecimiento de Latinoamérica se acelere progresivamente del 2 % en 2018 al 2,8 % en 2019, según esta última actualización.
Las cifras de la región, sin embargo, vienen lastradas por la profunda crisis económica que vive Venezuela, con una contracción estimada del 15 % para este año y del 6 % para 2019.
De hecho, el FMI prevé que la inflación en Venezuela ronde el 14.000 por ciento en 2018, alimentada por la pérdida de confianza en la moneda nacional, una situación acrecentada por el colapso en la producción de petróleo y su exportación.
Además, algunos países de la zona han visto reducidas sus expectativas de desarrollo para 2018 con respecto a las últimas perspectivas anunciadas en enero, entre ellos Argentina, que pasa del 2,5 % a 2 %, Colombia (del 3 % al 2,7 %) y Perú (del 4 % al 3,7 %).