Esta mañana el presidente Morales explicó que la crisis de agua no tiene una solución pronta y que solo es posible aliviar la situación con cisternas, el ejército presentó un plan de distribución que incluye 36 vehículos. Sobre la preocupación de los vecinos acerca de la calidad del agua de los camiones, la ministra de Salud, Ariana Campero, aseguró que el agua distribuida esta libre de parásitos y bacterias.

El Gobierno formó un Comité de Emergencia, integrado por ministros de Estado, Fuerzas Armadas y responsables de la Empresa Pública Social de Agua y Saneamiento (EPSAS). El plan es que las Fuerzas Armadas, en coordinación con el Comité de Emergencia, distribuyan agua a los barrios afectados.

Según el comandante del Ejército, Luis Ariñez, lo recomendable para garantizar el agua es el uso de al menos 100 camiones cisterna y un trabajo de 24 horas al día, por el momento solo cuenta con 36, que aumentarán a 80 hasta el viernes.

El Presidente admitió que la crisis fue una sorpresa para el gobierno, “como un terremoto” y que las soluciones a corto plazo tardarían uno a dos años. También aseguró que el suministro de agua potable en la ciudad de El Alto, "está totalmente garantizado".

ANÁLISIS DEL AGUA 

La ministra de Salud, Arianna Campero, aseguró que el Instituto Nacional de Laboratorios de Salud (Inlasa) realizó un análisis microbiológico para detectar virus y parásitos en el agua y el resultado fue negativo.

Explicó que las muestras fueron tomadas de los cisternas que distribuyen agua en los barrios que tienen el servicio cortado. “El agua de Epsas ha dado todo negativo, no tienen presencia de microorganismos patógenos o que causen enfermedades en las personas”, subrayó.

También se refirió al agua que se distribuye en cisternas de YPFB y explicó que se trata de unidades nuevas que no transportaron hidrocarburos. por lo que que está garantizada la calidad del agua que lllevan.

Finalmente, explicó que el agua puede contaminarse en los envases en los que se acarrea o en los domicilios si no se toma algunas medidas de seguridad. También recomendó no usar para consumo humano, el agua de vertientes.