En la conmemoración del levantamiento libertario del 10 de noviembre de 1810, los potosinos organizaron desfiles separados, la Gobernación encabezó el acto oficial y Comcipo convocó a un acto paralelo. Quizá por esto, el presidente Evo Morales prefirió entregar obras en poblaciones rurales, aunque estuvo en Potosí, en los primeros días de la semana.

El Gobierno Autónomo del Departamento de Potosí convocó al desfile y parada militar que comenzó en la plaza de Los Conciertos, en San Clemente y llegó hasta la avenida Litorial.

Los dirigentes del Comité Cívico Potosinista (Comcipo) también convocaron a un desfile con una ruta diferente, comenzó a la altura del Campo Marte y según su plan terminaría en la plaza Central. Incluso se temió un enfrentamiento entre los participantes a ambos desfiles; pero transcurrieron sin conflictos.

EL PRESIDENTE EVITó LOS ACTOS CÍVICOS EN POTOSÍ

Evo Morales prefirió no estar presente, pero participó en la firma de proyectos de agua potable y saneamiento básico en Uyuni y en la entrega de una planta de Regasificación en Villazón. Durante toda la semana, entregó obras en Potosí, y en cada uno de los actos lamentó que “algunos” digan que Potosí está abandonado, “muy pocos felizmente”, aseguró

“Mal pueden decir Potosí abandonado, si nos falta tiempo para entregar obras”, repitió el presidente Morales que entregó la unidad educativa Hugo Chávez, un hospital geriátrico, además firmó el decreto para la construcción de una fábrica de cemento y asistió a la firma del contrato para la construcción de la Planta Solar Fotovoltaica en Uyuni.

“Felicidades Potosí en tu aniversario. Tierra de incalculable riqueza que al mundo ha desarrollado. Símbolo de lucha contra el colonialismo”, escribió el mandatario en su cuenta de Twitter.