El presidente Morales y el gobierno de Venezuela saludaron la victoria de Daniel Ortega en las elecciones generales de Nicaragua y alabaron su lucha contra el imperio. Las elecciones se desarrollaron en medio de polémica por la falta de observadores internacionales de la Organización de Estados Americanos (OEA) de la Unión Europea (UE) y el estadounidense Centro Carter, porque Ortega no lo permitió, estos organismos cuestionaron el proceso electoral de 2011, en el que fue reelegido.

El presidente del Consejo Supremo Electoral (CSE), Roberto Rivas, explicó que los comicios fueron presenciados por cinco expresidentes de la región y por un grupo de expertos electorales de América Latina y 120 personalidades internacionales. Entre los que están: el exdirigente salvadoreño Mauricio Funes, asilado en Nicaragua porque afronta un proceso civil por supuesto enriquecimiento ilício; el hondureño Manuel Zelaya, los expresidentes de Guatemala Vinicio Cerezo y Álvaro Colom y el de Paraguay Fernando.

VENEZUELA Y BOLIVIA FELICITAN EL TRIUNFO DE ORTEGA  

"La República Bolivariana de Venezuela felicita al Presidente Comandante Daniel Ortega Saavedra, a la Compañera y Vicepresidenta Electa Rosario Murillo y al Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) por su categórico triunfo de paz en tan estratégica elección", señaló la cancillería venezolana través de un comunicado, en el que se califica el triunfo como el resultado de una "extraordinaria" movilización de las fuerzas populares.

El presidente Morales también felicitó a Ortega a través de su cuenta en Twitter: "Saludamos victoria del FSLN (Frente Sandinista de Liberación Nacional), a la cabeza de Daniel Ortega. Un paso más en la liberación de la patria de Sandino y su lucha contra el imperio”. "Felicitamos al valeroso pueblo nicaragüense por la jornada electoral y su apoyo a la revolución democrática sandinista", añadió Morales.

CONROVERSIAL MANDATO

Daniel Ortega ganó sus primeros comicios generales en 1984, y ha ido moldeando los principios del partido para adaptarlo a sus intereses: por ejemplo en la lucha contra la droga coopera con Estados Unidos, pero desde el punto de vista militar trabaja con Rusia.

Durante los últimos años ha promovido las reformas constitucionales para posiblitar su reelección indefinida. Tras volver al poder en 2006 logró captar apoyo popular en base a proyectos de vivienda, de salud, de crédito agrícola y otras ayudas financiadas con millones de dólares que le aportaba su aliado venezolano Hugo Chávez.

La oposición lo criticó por no informar sobre el destino del apoyo venezolano, y la prensa lo acusa de manejar el dinero a través de empresas privadas ligadas a la familia presidencial, Ortega y su esposa Rosario Murillo, quienes controlan numerosos canales de televisión y radios del país.

En 1998 su hijastra Zoilamérica Narváez, hija biológica de Murillo, demandó a Ortega por abuso y violación sexual desde que era una niña. El juicio no prosperó porque el líder sandinista se amparó en su inmunidad como diputado.