El ministro de Gobierno, Carlos Romero, instruyó a la oficina de la Interpol y a la Dirección Nacional de Migración presentar un plan para implementar un censo biométrico a ciudadanos extranjeros para impedir el ingreso de delincuentes al país.

 "La única manera de enfrentar esto es primero controlando de mejor manera el ingreso de gente ilegal que viene de otros países y, segundo, hemos pedido un censo biométrico a Interpol y Migración que debe ser implementado hasta fin de año", dijo la autoridad.

Romero afirmó que delincuentes extranjeros ingresan a Bolivia para cometer delitos, y se camuflan entre sus compatriotas que ingresan al país de forma legal para estudiar y trabajar.

CRIMENES VIOLENTOS EN SANTA CRUZ

La preocupación del ministro Romero se da por los últimos hechos violentos ocurridos en Santa Cruz. La tarde del miércoles cinco hombres armados con rifles ingresaron en una joyería en la zona de Equipetrol, golpearon al agente de seguridad y redujeron a las vendedoras, se llevaron todo las joyas de oro y piedras preciosas. No hubo muertos, ni heridos de gravedad. Según los testigos, dos de los asaltantes tenían acento portugués.

El domingo pasado Miguel Santarosa (55) y su hija Laura Santarosa (24), modelo estudiante de diseño de modas y madre de un niño de un año, fueron asesinados por 4 hombres armados en su casa. La fiscalía investiga un supuesto ajuste de cuentas relacionado al narcotráfico; la familia afirma que se trata de un crimen pasional, pues el novio de la modelo, quien pidió su mano minutos antes del asesinato, es un hombre casado.

Un fin de semana antes, en una fiesta de cumpleaños en San Matías dos presuntos sicarios mataron a cuatro personas, e hirieron a tres; al parecer se trataría de extranjeros.