La ONU acusó a Irán de tener 160 menores condenados a muerte
La oficina de Derechos Humanos instó al gobierno iraní a suspender la ejecución de una joven que asesinó a su marido a los 17 años, cuando era víctima de violencia doméstica.
La Paz, 26 junio (Infobae).- Naciones Unidas acusó a Irán hoy por tener en el “corredor de la muerte” a 160 jóvenes que fueron condenados a la pena capital por delitos cometidos cuando eran menores de edad. Además, la ONU informó que el país gobernado por Hasan Rohani ha realizado ejecuciones después de juicios en los que fueron violados principios míminos de justicia.
Estas acusaciones se suman a un pedido de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay, quien urgió a las autoridades iraníes a suspender una inminente ejecución de una joven de 21 años.
Razieh Ebrahimi tenía 17 años cuando asesinó a su esposo, con el que había sido casada por la fuerza a los 14 años. Según su abogado, la joven era víctima de violencia de género.
De acuerdo con la agencia Mehr, el abogado de Ebrehimi pidió aplazar la ejecución a la espera de que la justicia decida si la joven “había alcanzado la madurez” en el momento de los hechos, es decir, la capacidad para comprender sus actos.
A través de un comunicado, Pillay denunció “la aplicación inaceptable de la pena de muerte a criminales menores en Irán”.
“El derecho internacional sobre Derechos Humanos prohíbe claramente la ejecución de delincuentes menores”, añadió la Alta Comisionada, quien agregó además que esa pena no es compatible con las obligaciones internacionales que ha asumido Irán, como el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, y la Convención sobre los Derechos del Niño.
“El derecho internacional sobre Derechos Humanos prohíbe la ejecución de delincuentes menores”
En el mismo comunicado, Pillay mencionó como antecedente el caso de Jannat Mir, un chico afgano de 17 años que fue enviado por el gobierno iraní a la horca en abril por delitos vinculados a drogas. Aparentemente, el joven fue condenado y ejecutado sin haber hecho efectivo nunca su derecho a un abogado.
La ONU estima que este año al menos 250 personas han sido ejecutadas en Irán, a pesar de que distintas organizaciones de derechos humanos estiman que las cifras son mucho más elevadas.