“Estoy sorprendida de cuán rápido has olvidado la caballerosidad con que te dirigías a mi persona, me doy cuenta de que no todo lo que brilla es oro…”, así empieza la carta que Gabriela Zapata, exnovia del presidente Evo Morales y exgerente de CAMC, envió hoy al ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana.

En la misiva que fue presentada por su abogado Eduardo León, Zapata le recrimina a Quintana por haberla llamado ‘vulgar delincuente’. “Me asombra tu abuso desmedido contra mi persona, pero lo que más llama la atención es la gravedad con la que atentas al Estado Nacional”.

La exejecutiva por medio del documento, explica, que no le teme a Quintana ni a sus amenazas, ya que conoce sus pasos. Además, resalta que está más fuerte que nunca y que la cárcel le dio más valor para defenderse y afrontar las advertencias que le llegan.

“Pues debo decirte que he aprendido mucho de ti y, te agradezco por darme mi mejor escuela, pues estoy más fuerte que nunca, la cárcel me dio el valor suficiente para defenderme, pese a todas tus amenazas que me enviaste. Haz provocado una epidemia atentando contra la democracia, la ética, la justicia y más aún contra la dignidad”.

EL PEOR CASTIGO

Zapata califica su encierro como el peor castigo que lleva en su vida por no obedecer las órdenes de Quintana "en lo que tenía que decir ante los medios de comunicación y al pueblo bolivianos". A pesar de haber suplicado e implorado al ministro Quintana que "no la utilice para esto", ahora se encuentra detenida en la cárcel de Miraflores desde febrero.

“Seguramente tomarás represalias contra mi persona y mi entorno, como lo hiciste con las filas de inocentes muchachos que daban la vida por este proceso que tú subordinaste psicológicamente, laceraste familias con tus actos, tu típica: estratagema categórica propia de ti, la conozco muy bien, como ni te imaginas, como a tus empleados y operadores, cuidado tu propia inteligencia te traicione, podrías estar igual o peor que yo, está claro que si algo sucede conmigo el único responsable eres tú”.

ADIÓS MI REY…

En la carta, acusa a Quintana de ser propulsor de traicionar y destruir al hombre que dio su confianza y ‘sabes de qué estoy hablando’, detalla.

“Te recalco que no soy instrumento tuyo ni de nadie; la impunidad del poder no es terno querido y el derecho no siempre estará a tu servicio y ojalá no te de la paranoia de decir que soy agente de la CIA que dios te perdone. El único responsable de todo esto eres tú”, finaliza la carta y se despide con la frase ‘adiós mi rey’, en referencia a la autoridad gubernamental.