Los judíos no creen en Dios
Los judíos están demostrando al mundo la utilización de Dios, instrumentalmente, en sus tareas coloniales e impunes.
Simpre me ha llamado la atención, cuando personas crueles o hipócritas son las más creyentes de Dios, y están pronunciando su nombre para cualquier cosa en todo momento. Por supuesto que esas personas, que son muchísimas en este planeta no creen en Dios, sino que lo utilizan instrumentalmente para salvar su poca consciencia. Los judíos dicen que son el pueblo elegido de Dios. Mito que manejan desde siempre para justificar sus asesinatos, sus fechorías como en Palestina, en nombre de Dios. Es lógico que sólo utilizan a Dios, como arma psicológica y racial frente al mundo, e identidad colectiva pero totalmente hipócrita y soberbia. Ciertamente saben actuar como tal, como en el Muro de los Lamentos donde lloran a Dios teatralmente.
Ninguna religión puede justificar la muerte de unos humanos, contra otros humanos. Los pecados mundanos son enteramente humanos, de errores históricos e inventos que después se justifican con el invento de la violencia y la muerte. Es absolutamente imposible que los Dioses valoren la violencia y la muerte, para justificar a los poderosos de todas las sociedades.
Los judíos están demostrando al mundo la utilización de Dios, instrumentalmente, en sus tareas coloniales e impunes. Con seguridad les interesa un comino Dios, sino sus perspectivas mundanas de venganza y muerte. Lo dicen en los medios de comunicación mundiales, sus criminales gobernantes elegidos democráticamente por la podredumbre judía.
El fin justifica los medios junto a Dios: es la práctica judía, bajo los auspicios del sionismo norteamericano. Juego geopolítico extremo, a vista de todo el mundo que ve con bronca el poder norteamericano con sus mercenarios judíos. Que no les interesa las protestas multitudinarias del mundo, que no les interesa las críticas ni las mínimas peticiones de los propios afectados en Gaza.
La muerte de niños es para estos mercaderes de la muerte judíos, sólo temas colaterales y poco importantes ante el juego de la geopolítica del poder. La degradación humana en su máxima expresión. La degradación judía en sus colonias asesinando a palestinos cotidianamente, sin leyes ni normas internacionales que se respeten. Pues, quizás ya conocidos en la historia mundial: asesinaron de la misma manera al propio Cristo Jesús.
El poder político sionista está funcionando, para acallar las voces en contra de la matanza en Palestina. Como nunca en el mundo, es la demostración de que ese asunto de la democracia sólo es para los de arriba, muy pocos que mandan en este mundo, frente a todos los demás. Frente a la ingenuidad o la estupidez mundial que todavía creen en la democracia occidental, civilizada y dizque racional. Es el asco más repugnante posible, de la civilización occidental con sus discursos en los eventos hipócritas de las Naciones Unidas, o los parlamentos de los serviles políticos europeos, frente a la risa judía del gatillo criminal.
En todo caso, los judíos se llenan la boca alabando a Dios y rezándole teatralmente en el Muro de los lamentos. Y en realidad no creen en Dios. Porque no es compatible ética y moralmente los genocidios judíos, con sus alabanzas a Dios. Porque en esencia Dios (si es que existe) no está con los crueles, con los asesinos, con los hipócritas y con los que hacen mal a su prójimo. Porque Dios no puede avalar y arropar a los asesinos, todo lo contrario. Si es que se cumplen las escrituras, los judíos tienen que ir al infierno por el inmenso sufrimiento que infringen a los palestinos, a los niños, a las mujeres, a los ancianos en Gaza. Pues no es posible considerar mínimamente, la posibilidad de que Dios permita semejante criminalidad del sionismo judío a otro pueblo como el palestino. En fin.
La complicidad es también la otra cara o mejilla de quiénes se dicen no estar de acuerdo con el sionismo colonial; pero que no hacen nada por impedir la matanza o genocidio en Gaza y Cisjordania. Pues la complicidad es peor que el mismo hecho, porque dicha actitud se encubre así misma justificando el crimen. Como la mayoría del pueblo alemán frente al nazismo; hoy la mayoría del pueblo judío frente al sionismo en Israel.
En definitiva, la utilización de Dios por los judíos simplemente es anti ética. Debería ser condenado por los patriarcas, sacerdotes, obispos o gente pastoral de todas las religiones del mundo. Es la demostración del cinismo y la criminalidad política, cavernaria y nada civilizada incluso en términos de la hipócrita normativa legal de occidente. Al mismo tiempo es la destrucción del básico acuerdo, moral y ético, y consenso de las creencias como costumbres de los distintos pueblos hacia sus religiones.
En definitiva, los gobernantes sionistas de Israel son el demonio mismo. Son Satán en persona, utilizando a Dios de la manera como lo hacen en sus rezos de la mañana, para apretar el gatillo asesino en el día sobre niños, mujeres y ancianos palestinos. Ojalá los Dioses les condenen y castiguen si es que hay justicia divina, porque terrenal no hay.