La Paz, 27 de mayo (Oxígeno).-  Tras la renuncia de Wilma Velasco y Ramiro Paredes, hoy por la tarde el vicepresidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Wilfredo Ovando, anunció su renuncia ante la ola de críticas sobre el daño a la credibilidad de la institución.

“La renuncia es de carácter personal”, dijo Ovando en una conferencia de prensa desde las instalaciones del Tribunal Supremo Electoral en Sopocachi.

Actualmente, la Constitución Política del Estado, aprobada en 2009, indica en el parágrafo II del Artículo 206 que el TSE “está compuesto por siete miembros, quienes durarán en sus funciones seis años sin posibilidad de reelección, y al menos dos de los cuales serán de origen indígena originario campesino”.

Con la declinatoria de Ovando, la Sala Plena del TSE se queda compuesto con sólo cuatro vocales que hacen un quórum mínimo para sesionar. Los vocales Marco Ayala, Irineo Zuna, Fanny Rivas y Dina Chuquimia son los únicos que quedan como titulares.

Ovando fue una de las primeras autoridades de la institución electoral en ser cuestionada hace cuatro años cuando se llevó adelante el proceso de las elecciones judiciales. Organizaciones políticas se encargaron de difundir fotografías con las que se le vinculó al gubernamental Movimiento Al Socialismo (MAS).

El abogado, designado por el presidente Evo Morales como vocal electoral, fue el primer presidente de la institución electoral en el marco de la nueva Constitución Política del Estado. Ante ese antecedente, envió su carta de renuncia al Jefe de Estado..

“Por decisión personal y en conformidad al Art. 20 -2 de la Ley 018 del Órgano Electoral Plurinacional, presentó ante su autoridad mi renuncia al cargo de Vocal del Tribunal Supremo Electoral, desempeñada con total apego a la Constitución Política del Estado, las leyes y demás normas que rigen”, se lee en parte de la carta de renuncia de Ovando.

“Agradezco la oportunidad y la confianza ofrecida para el desempeño de tan alto cargo”, añade.

El martes, dirigentes del oficialismo y de las fuerzas opositoras expresaron su desconfianza sobre el Tribunal Supremo Electoral (TSE), que tiene la tarea de llevar adelante los referendos autonómicos del 12 de julio.

La primera vocal electoral en dimitir fue Wilma Velasco, quien renunció de la presidencia del TSE; el martes, el turno fue de Ramiro Paredes, quien dio un paso al costado luego de ser punto de críticas por festejar su cumpleaños junto a militantes del MAS en una fiesta días antes de las elecciones regionales.

Ante la declinatoria de Velasco, Ovando asumió la presidencia interina y hoy se sumó a la lista de renuncias.

La Carta Magna establece, en el parágrafo III, que es la Asamblea Legislativa tiene la potestad para elegir a los miembros del Órgano Electoral mediante dos tercios de votos, que actualmente tiene el gubernamental Movimiento Al Socialismo  (MAS).

La máxima institución electoral del país está descabezada, su crisis institucional ha llegado a su punto más alto, por lo que los dirigentes piden una reforma estructural, en lugar de elegir a nuevos vocales.