A cuatro meses de disputar los partidos del repechaje al Mundial, las dudas siguen y crecen. Bolivia volvió a perder en un amistoso, esta vez 0-3 ante Japón en Tokio, y ya son tres derrotas consecutivas en su preparación – venía de ser goleada por Rusia y Corea del Sur-.

La Verde, que hoy vistió de blanco, fue ampliamente superada por la ya mundialista Japón, que demostró su buen estado de forma de cara a la cita mundialista.

De hecho, a la Selección nipona le tomó 4 minutos abrir el marcador gracias a un buen gol de Daichi Kamada, tras una larga asistencia de Take Kubo.

La defensa de la Verde era incapaz de contener los avances de los japoneses, que conseguían penetrar con facilidad por ambas bandas en el área rival, generando mucho peligro.

Además, Bolivia tampoco pudo aprovechar algún contragolpe, pues los japoneses hicieron gala de su condición física para replegarse con rapidez e impedir cualquier intento de la Verde.

Recién a los 30 minutos, un remate de Gabriel Villamil que paso cerca del arco rompió la monotonía japonesa.

En la desventaja, Bolivia buscó ser más ofensiva en el complemento, pero su única arma fue el remate de larga distancia y ninguno de ellos provocó más de un susto a la defensa nipona. De hecho, las estadísticas marcan que Bolivia no tuvo remates con dirección de portería.

Japón, en cambio, generaba peligro cada vez que pisaba el acelerador y, tras varios avances frustrados, anotó el segundo tanto en el minuto 72, con un disparo a portería de Shuto Machino que se coló entre los brazos del guardameta boliviano, Guillermo Viscarra.

Un tercer gol en el minuto 78, tras un preciso disparo de Keito Nakamura desde dentro del área boliviana, sirvió para sentenciar el partido.

Es llamativo que el técnico de la Verde, Óscar Villegas, solo realizó dos cambios durante todo el encuentro, a pesar del evidente cansancio que mostraron los jugadores, sobre todo, en el segundo tiempo.