La marcha de los seguidores de Evo Morales, que partió de Patacamaya el pasado viernes, llegó a la ciudad de La Paz la tarde de este lunes y, ante la imposibilidad de entrar a Plaza Murillo, decidieron instalar vigilias en cercanías del lugar.

Dirigentes del evismo afirmaron que la vigilia se mantendrá hasta que el Gobierno dé respuesta a su “pliego petitorio”.

Juan Enrique Mamani, uno de los dirigentes del evismo, fue el encargado de leer el pliego de demandas de su sector. Entre otros puntos, señaló que se exige el cese de la “persecución política” y “judicial” de los “líderes y dirigentes sociales”.

Asimismo, señaló que se exige al Gobierno detener “cualquier plan de eliminación física” en contra de Evo Morales y “garantizar su vida” como la de cualquier otro boliviano.

Por otro lado, afirmó que se exige la “inmediata solución” a la escasez de combustible e incremento a productos de la canasta familiar, entre otros.

Pidió también la anulación de algunos artículos del Presupuesto General del Estado 2025 que “comprometen la economía nacional mediante el endeudamiento con créditos internacionales” y el retiro “inmediato” de los magistrados prorrogados que ejercen funciones desde el 31 de diciembre 2023.

Además, exigió la abrogación del Decreto que declara una pausa ambiental en el país, medida tomada cuando incendios afectaban millones de hectáreas, sobre todo, en el departamento de Santa Cruz.

Finalmente, afirmó que se pide la liberación de los “detenidos políticos”, particularmente de los evistas que fueron encarcelados acusados por delitos vinculados al bloqueo de caminos que llevaron adelante a finales del 2024 y que derivó en un daño económico de más de 2 mil millones de dólares al Estado.

Tras la lectura del documento, los seguidores de Morales comenzaron a desplegarse en todos los accesos que llegan a la plaza Murillo.

Inicialmente, los evistas pretendían poder entrar a Plaza Murillo; sin embargo, la Policía cerró los accesos.

Además, el ministro de Gobierno, Carlos Eduardo del Castillo, denunció que durante su paso, desde Patacamaya, la marcha evista atentó contra la Policía y turistas, dejando al menos cinco heridos (tres oficiales y dos civiles).