El fin de semana, el dirigente cocalero, Evo Morales, reiteró que no se presentará a declarar ante la Fiscalía  Departamental de Tarija tras ser imputado por el delito de trata y tráfico de personas con agravante por haber mantenido una relación y haber embarazado a una joven menor de edad años atrás.

“Últimamente hablan de aprehensión y detención. No soy tonto, pues”, manifestó en su programa dominical.

A decir del expresidente, recibió información de policías y militares sobre supuestos planes no solo para detenerlo, sino también para atentar contra su vida.

La semana pasada, la fiscal departamental de Tarija, Sandra Gutipérrez, informó que ase imputó formalmente a Morales y afirm´po que existe una orden de aprehensión activa en su contra.

Empero, afirmó que la aprehensión no pudo ser ejecutada debido a que pobladores del Trópico, particularmente de Lauca L y Villa Tunari, activaron una red de protección para proteger a su líder.

De hecho, el dirigente del evismo, Vicente Choque, afirmó que Morales tiene una “seguridad de élite” en el Chapare y  advirtió que “correrá sangre” si se aprehende a Evo Morales.

 “Para la aprehensión de nuestro hermano Evo, seguramente va a correr sangre, y eso queremos afirmarlo nosotros, no va ser sencillo. Si el Gobierno quiere apresarlo, tenemos seguridad de élite, por supuesto, vigilias; así que, si se atreven a aprehenderlo, les va a costar mucho”, dijo.

Al respecto, Morales incluso señaló que otros de sus seguidores se ofrecieron “voluntariamente” a darle protección.

“Está creciendo este tipo de solidaridad, venir aquí, brindar seguridad y apoyo”, afirmó Morales.