El Ministerio de Gobierno aguarda la notificación respectiva para proceder con los trámites de excarcelación y posterior extradición a Estados Unidos de Maximiliano Dávila, exjefe antidroga del gobierno de Evo Morales.

El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, explicó que, una vez conozca los alcances del Auto Supremo (AS) 337/2024 que declara procedente la extradición de Dávila, se realizará varias actividades en coordinación con el Ministerio de Relaciones Exteriores que, incluso, implicaría la posibilidad de que un avión de Estados Unidos arribe al país.

“Hasta este momento ni el Ministerio de Gobierno ni Régimen Penitenciario han sido notificados formalmente con la autorización de extradición del señor Dávila. (En el caso) del señor Dávila, como con cualquier narcotraficante dentro del territorio nacional que sea buscado por un segundo o tercer país, se va a cumplir la normativa vigente y lo dispuesto por las autoridades judiciales”, aseguró.

La determinación de la sala plena del Tribunal Supremo de Justicia dispone la extradición inmediata de Dávila a los Estados Unidos, donde es investigado por los delitos de asociación delictuosa relacionada con narcotráfico y asociación delictuosa por portación de armas; este delito es sancionado con una pena de hasta 20 años de cárcel.

El presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Marco Ernesto Jaimes, explicó que en los próximos días el Juzgado de Instrucción Penal, que tomó conocimiento del pedido, deberá emitir el mandamiento de excarcelación para cumplir con cada uno de los pasos consiguientes hasta el traslado de Dávila a los Estados Unidos.

Del Castillo explicó que la extradición involucrará coordinación con el Ministerio de Relaciones Exteriores y los representantes diplomáticos de los Estados Unidos.

Dávila fue sometido en esta jornada a unos exámenes de salud rutinarios. “No hay nada de qué preocuparse, tiene todas las condiciones necesarias para seguir guardando detención preventiva en San Pedro o ser extraditado a Estados Unidos”, aseguró.

Desde su aprehensión, en 2022, Dávila guarda detención preventiva en la cárcel de San Pedro de La Paz.

Dávila fue director de FELCN específicamente entre 2018 y 2019. Tras la renuncia de Morales en noviembre de 2019, Dávila dejó el cargo, aunque se mantuvo vinculado a la Policía hasta 2021.

El 22 de enero de 2022, Dávila fue aprehendido en Villazón, Potosí, cuando intentaba pasar la frontera con dirección hacia Argentina.

El exjefe de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) es denunciado por colaborar con una organización que refinaba en Bolivia cocaína producida en países vecinos, para luego exportarla a destinos como Estados Unidos, según una investigación oficial.

Fue enviado en febrero de 2022 al penal de San Pedro con seis meses de detención preventiva por el presunto delito de legitimación de ganancias ilícitas.

A través de un auto supremo, el 14 de agosto de este año, el TSJ ordenó su detención preventiva con fines de extradición.