YPFB dice que su Terminal en Arica alcanzó su tope almacenaje con 1,3 millones de barriles de combustible
El vicepresidente Nacional de Operaciones de YPFB, Ariel Montaño, afirmó que desde agosto hasta la fecha, la terminal reportó un óptimo funcionamiento; sin embargo, la distribución que hace se ve afectada por los puntos de bloqueo en el país, principalmente Cochabamba.
La Terminal de Sica Sica en Arica, Chile, de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), alcanzó su capacidad máxima con la descarga de 1,3 millones de barriles de combustible y el despacho de 5.379 cisternas, entre agosto y octubre, informó este jueves el vicepresidente Nacional de Operaciones de YPFB, Ariel Montaño.
“Hemos alcanzado la capacidad máxima de la terminal en cuanto a su uso, durante este periodo hemos descargado 1,3 millones de barriles de combustibles y se ha despachado hacia el territorio boliviano, es decir, se ha descargado en 5.379 cisternas”, explicó en conferencia de prensa.
Una de las principales plantas de importación de combustible es la de Sica Sica, administrada por YPFB. Últimamente surgió información incompleta sobre su funcionamiento que puede llevar a conclusiones erronas, advirtió.
Desde agosto hasta la fecha, la terminal reportó un óptimo funcionamiento; sin embargo, la distribución que hace se ve afectada por los puntos de bloqueo en el país, principalmente Cochabamba.
“Esta distribución y libre tránsito se ve afectada por puntos de bloqueo en el territorio nacional, lo que evita pueda existir la rotación de cisternas necesarias para la distribución en territorio nacional”, explicó.
De hecho, aclaró que los problemas en el abastecimiento de combustible no tienen relación con el uso de la terminal en Arica, ni de la importación o volúmenes disponibles actualmente.
Sino, “es una afectación derivada de la interrupción al libre tránsito de cisternas en territorio nacional, lo que hace que el combustible importando no pueda llegar a las plantas de almacenaje”, puntualizó.
Evo Morales y sus afines cumplen este jueves 11 días de bloqueo de caminos, focalizados en Cochabamba. Con esta medida exigen anular el proceso penal por trata y tráfico de personas contra el expresidente y asegurar su candidatura presidencial para las elecciones de 2025.
La extrema medida ocasiona daños millonarios a la economía, denunció el Gobierno boliviano.