En carta a la ONU, Evo confirma que busca el reconocimiento del Congreso que lo proclamó como candidato
“Respeto y reconocimiento al Congreso del MAS-IPSP que se desarrolló en Lauca Ñ, Cochabamba”, establece uno de los 13 puntos del pliego de la marcha -que empezó el martes en Caracollo, Oruro- y que fue puesta en conocimiento de Guterres en una carta fechada el 20 de septiembre, con firma “Marcha para salvar Bolivia”.
En una carta enviada al secretario General de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, el expresidente Evo Morales admitió que la marcha que está camino a La Paz tiene entre sus objetivos el reconocimiento del congreso del MAS de Lauca Ñ, donde se lo eligió como jefe del MAS y se lo proclamó candidato único a la presidencia.
“Respeto y reconocimiento al Congreso del MAS-IPSP que se desarrolló en Lauca Ñ, Cochabamba”, establece uno de los 13 puntos del pliego de la marcha -que empezó el martes en Caracollo, Oruro- y que fue puesta en conocimiento de Guterres en una carta fechada el 20 de septiembre, con firma “Marcha para salvar Bolivia”.
El reconocimiento del congreso es atribución del Tribunal Supremo Electoral (TSE), el cuarto poder del Estado, que en octubre decidió no reconocerlo porque en su convocatoria y desarrollo verificó el incumplimiento del Estatuto del MAS, como la falta de coordinación con organizaciones matrices (campesinos, interculturales y mujeres Bartolina Sisa) y la presentación de documentos.
Morales apeló la decisión y el ente electoral volvió a rechazarlo. En ese congreso anulado por el incumplimiento del estatuto masista se “ratificó a Evo Morales como presidente del MAS IPSP” y se lo declaró “como candidato único del MAS IPSP” para las elecciones de 2025.
La carta fue publicada por Morales en sus cuentas en redes sociales.
Un fallo constitucional, apegado a una opinión consultiva de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte-IDH), establece que la reelección indefinida no es un derecho humano, lo que afecta las aspiraciones electorales del también dirigente cocalero.
La marcha del expresidente comenzó el martes en Caracollo, Oruro, con destino a La Paz. En la primera jornada se enfrentaron con un reducido grupo de comunarios y cooperativistas que instalaron una vigilia en Vila Vila con la idea de frenar la protesta.
El Gobierno convocó al expresidente al diálogo y el propio presidente Luis Arce lo esperó el viernes sin resultados por más de una hora en el lugar fijado, el Ministerio de Educación. Morales dijo que no recibió la invitación, pero se vio cómo sus seguidores evitaron con violencia que un funcionario del Ministerio de la Presidencia le entregue la invitación en Patacamaya, donde estaba la marcha.
Morales en su carta a Guterres pide “atención a la situación actual en Bolivia”, y su intervención para garantizar respeto de los derechos.
La ministra de la Presidencia, María Nela Prada, lamentó el viernes la decisión del expresidente de no acudir al diálogo y recordó que sus seguidores amenazan con una guerra civil y la interrupción del mandato del presidente Arce.