El vocero de la Compañía de Jesús en Bolivia, Sergio Montes, afirmó este miércoles que los exprovinciales que hayan encubierto casos de pederastia y abusos a menores deben ser investigados y, en caso de probarse su culpabilidad, ser juzgados.

“Todas las personas que fueron parte de este proceso y tienen responsabilidad, tienen que ser convocadas por la Justicia y ahí podrán dar su versión. No podemos señalar ahora que hay personas que han hecho cosas porque eso se define en las investigaciones”, aseguró entrevistado por La Razón.

El pasado lunes, el fiscal general del Estado, Juan Lanchipa, dispuso reiniciar las investigaciones del denominado Caso Padre Roma, quien falleció el año 2019, y dejó confesión notariada respecto a que abusó sexualmente a cientos de niñas indígenas en el municipio de Charagua, en el departamento de Santa Cruz.

Lanchipa, sin embargo, señaló que la investigación se realizará por el delito de Encubrimiento en contra de quienes habrían tomado conocimiento de las agresiones sexuales cometidas en contra de menores de edad y no denunciaron el hecho ante las instancias pertinentes.

Según La Razón, dos de los involucrados en el encubrimiento son los jesuitas Ignacio Suñol y Oswaldo Chirveches.

Ambos jesuitas conocieron en 2019 el caso de abusos sexuales contra niñas de Charagua, Santa Cruz, de parte de Luis María Roma Padrosa. Chirveches conformó una comisión de investigación del caso y Suñol cerró el expediente y lo derivó a la Curia de la Compañía de Jesús en Roma, Italia.

“Todos los exprovinciales pueden tener una responsabilidad respecto de (los casos de pederastia), pero nosotros no somos el fiscal ni el juez para establecer el delito”, afirmó Montes al respecto.

En ese sentido, el Vocero de la Compañía de Jesús aseveró que “es necesario” que la investigación se vuelva a realizar para saber si hubo actitudes de protección a curas pederastas, de silencio y de omisión. Además, aseveró que la Justicia boliviana debe establecer “responsabilidades” a quienes permitieron estos dolorosos actos.

“Si queremos hacer algo por las víctimas, tenemos que trabajar en otorgarles justicia integral para atender el dolor y daño que se les ha ocasionado”, acotó el sacerdote jesuita.

El vocero, además, contó a La Razón que la investigación sobre Roma, fallecido el 6 de agosto de 2019, se abrió en 2019 “cuando el perpetrador vivía” y que, desde mayo de 2023, la Fiscalía de Santa Cruz cuenta con la documentación del caso.

“Estos contenidos de esta investigación han estado en conocimiento de la Fiscalía de Santa Cruz”, dijo.

Cuestionó que la Fiscalía tampoco buscó más elementos desde la gestión pasada, pese a que contaba con las pruebas y la investigación canónica de la orden religiosa.

“¿Por qué no hay más elementos que nos permitan saber estas actuaciones? En esto puede haber negligencia”, cuestionó.

Asimismo, admitió que después de la muerte de Roma había la necesidad y “obligación” de hacer justicia para las víctimas. “No se lo hizo y por eso es que estamos pidiendo que la Fiscalía pueda indagar el caso”.

“Nosotros nos preguntamos por qué la Fiscalía no ha sacado más elementos de ese material. Ahí están cosas. Se pudo hondar más en la investigación”, reclamó.

Al igual que sucediera hace un año con el jesuita español Alfonso Pedrajas (+), quien dejó confesado en un diario los abusos que cometió contra más de 80 menores en Bolivia, el fin de semana el periódico El País de España informó que el cura catalán Luis María Roma (+) dejó una confesión notariada en el que admite haber abusado sexualmente a más de 100 niñas indígenas en Bolivia, específicamente el municipio cruceño de Charagua.

Según el reporte del medio español, Roma habría escrito, al igual que Pederajas en un diario, durante su estancia como misionero en Charagua, entre 1994 y 2005, cómo fotografiaba, filmaba y abusaba de más de un centenar de niñas, la mayoría indígenas guaraníes.

La investigación, que comenzó en marzo de 2019, por encargo de la cúpula de la orden en Bolivia,  duró seis meses, dijo El País en su edición de este domingo. El diario hace notar que los jesuitas no informaron a las autoridades bolivianas de sus hallazgos ni indemnizaron a las víctimas.

“La investigación, que comenzó en marzo de 2019, por encargo de la cúpula de la orden en Bolivia, se alargó durante seis meses. Los jesuitas no informaron a las autoridades bolivianas de sus hallazgos ni indemnizaron a las víctimas”, señala el medio español.

Al respecto, la Compañía de Jesús, a través de un comunicado, admitió que sus exautoridades tuvieron un accionar “negligente,  indolente y nefasto” respecto a la atención de las denuncias de menores víctimas de abusos sexuales por parte de curas jesuitas y pidió al Ministerio Público reabrir el caso contra el cura catalán Luis María Roma .

// Con información de La Razón