El ministro de Gobierno, Carlos Eduardo del Castillo, informó la noche de este viernes que el humorista Raúl Cuenca, que fue detenido tras personificar  a un oficial y usar un uniforme policial en una entrevista televisiva, fue liberado. La autoridad aseveró que es “inaceptable” que se atente contra la libertad de expresión.

A través de una serie de mensajes en sus cuentas en las redes sociales, Del Castillo dejó en claro que ninguna persona civil puede utilizar uniformes de las fuerzas del orden sin autorización; sin embargo, afirmó es inaceptable activar mecanismos de seguridad o penales por actividades artísticas o culturales.

“En relación al tema de la detención del comediante, Raúl Cuenca, es menester decir que reconocemos la labor policial y recordamos a la población que ninguna persona civil puede utilizar uniformes de las fuerzas del orden que no tengan autorización. Sin embargo, activar mecanismos de seguridad policial o acciones penales a partir de una entrevista o un acto cultural o artístico es inaceptable”, afirmó.

Y acotó: “Ninguna forma de censura o afectación a la libertad de expresión puede ser tolerada en una sociedad democrática”.

En ese sentido, Del Castillo señaló que se activó una investigación interna por lo sucedido este viernes contra el humorista.

“El tema ya fue subsanado y la persona se encuentra en libertad, asimismo, se tomarán las acciones correspondientes en el interior de la policía”, acotó.

El artista y humorista Raúl Cuenca fue aprehendido la mañana de este viernes por la policía tras salir de una entrevista en el canal Unitel. La detención se produjo después de que el elenco de More Humor promocionara sus próximas presentaciones. Según Piki Gamarra, miembro del elenco, la aprehensión de Cuenca se trata de un malentendido, ya que su actuación era únicamente una sátira de personajes cotidianos.

Tres policías vestidos de civil interceptaron a Cuenca a la salida del canal. Solo uno de ellos se identificó mostrando su placa antes de llevar al humorista a las celdas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc). La acusación en su contra es por usurpación de funciones, delito por el cual está siendo investigado.

Los efectivos vestidos de civil que aprehendieron al humorista argumentaron actuar por "orden directa de un superior", según Piki Gamarra.